miércoles, 26 de julio de 2017

60 años del SEAT 600


Se cumplen 60 años del Seat 600, el coche más mítico de España, el modelo más legendario de la marca automovilística Seat y, por qué no, un símbolo de la historia contemporánea española.
El Seat 600 derivaba del Fiat 600 diseñado por el ingeniero italiano Dante Giacosa, fabricado en 1955 y con gran éxito de ventas, pues en solo dos años se produjeron 300.000 unidades. Si bien inicialmente se importó de Italia, pronto se decidió construirlo de producción propia en España bajo acuerdo con la marca Fiat.
Su nombre se debía a que tenía una cilindrada de 600 cc, aunque en verdad era de 633 cc. Era la época en la que los modelos de Seat (o mejor dicho de Fiat) se bautizaban en función de su cilindrada, como fue también el caso del 800, 850, 1400 y 1500. Mecánicamente el motor era de gasolina NO 86 de cuatro cilindros, arranque mediante una palanca situada en el túnel de la calefacción, par motor de 4.0 mkg DIN a 2.800 rpm., carburador monocuerpo Weber 22 IT invertido, potencia de 21,5 CV a 4.600 rpm., frenos de tambor en las cuatro ruedas, caja de cambios de 4 velocidades y velocidad máxima de 95 Km./hora. Otras particularidades eran su carrocería monocasco-portante y ligera (de 3,34 metros de largo y 1,43 metros de alto), su interior para cuatro plazas, su ligereza (pesaba 450 Kg.), dos puertas delanteras con apertura de delante hacia atrás o "tipo suicida" para facilitar el acceso a los asientos traseros y motor ubicado en la parte posterior, de ahí la inconfundible rejilla de ventilación trasera.


El primer Seat 600 que salió de fábrica tenía número de bastidor 100.106-400001 y se matriculó el 5 de diciembre de 1957 con placa M-184018. Sin embargo, el primero en matricularse no fue el primero que salió de fábrica. Tenía número de bastidor 1001106-400071 se matriculó en Barcelona el 8 de junio de 1957 con placa B-141141.
Entre 1963 y 1970 se fabricó una segunda versión mejorada con respecto al de 1957, el Seat 600D. Las diferencias eran, entre otras, el sistema de arranque con llave situada en el centro del salpicadero, una cilindrada superior de 767 cc, un par motor de 5.2 mkg SAE a 2.500 rpm., un carburador Bressel 28 ICP-I, una potencia de 25 CV a 4.800 rpm. y aumento de la velocidad máxima a 108 Km/hora. Exteriormente se mejoraron algunos acabados como los faros, los embellecedores y el depósito de gasolina.
Entre 1969 y 1973 se fabricó la tercera versión, el Seat 600E, de características mecánicas idénticas al Seat 600D salvo aspectos de diseño como los detalles del acabado interior, la apertura de las puertas hacia delante, mayores faros delanteros y pilotos traseros, cerraduras de botón y nuevo embellecedor frontal. Interiormente se mejoró el salpicadero y el tablero, además de dotar a los asientos con una nueva tapicería.


Finalmente, entre 1972 y 1973 se fabricó la última y más moderna versión, el Seat 600L Especial. Las novedades que aportaba era, entre otras, un sistema de arranque mediante de un clausor anti-robo situado en la columna de dirección, un par motor de 4.6 mkg DIN a 3.500 rpm., un carburador Solex C28 PIB-3, una potencia de  29 CV (DIN) a 5.000 rpm. y aumento de la velocidad máxima a 115 Km/hora. En cuanto a aspectos de diseño, aportó mejoras de acabado y comodidad.
Muchas historias se podrían explicar alrededor de este mito sobre ruedas. Sin embargo los aspectos más relevantes que merecen destacarse se podrían sintetizar en diez particularidades que han hecho del Seat 600 un coche legendario y con un apartado en mayúsculas dentro de la historia más reciente de España.
En primer lugar, fue el modelo que se fabricó durante más años consecutivos, entre 1957 y 1973, un récord reflejo del gran éxito de ventas y que fue posteriormente superado por el Seat Ibiza que en la actualidad cumple 34 años de vida y cinco generaciones. La última unidad salió de fábrica el 3 de agosto de 1973. Los trabajadores de la Zona Franca de Barcelona lo despidieron con una pancarta que decía "Naciste príncipe. Mueres rey".


En segundo lugar, fue el primer coche utilitario español. Si bien durante los años cincuenta hubo el precedente de los microcoches como el Biscúter, el David, el Iso Isetta, el Goggomobil, el PTV, el Clúa o el Cimera, entre otros, el Seat 600 fue el primer automóvil de turismo de tipo "utilitario", es decir, de pequeñas dimensiones, bajo coste y poco consumo. A su llegada, los microcoches y los triciclos motores terminaron desapareciendo salvo algunos casos como las versiones furgoneta usadas para mercancías. Anteriormente a los años cincuenta no existieron utilitarios o bien los más parecidos a ellos estaban restringidos a gente de alto poder adquisitivo que podía permitirse adquirirlo.
En tercer lugar, fue el primer automóvil español con más derivados. Aparte de las versiones antes citadas que introdujeron mejoras mecánicas y de diseño con respecto a sus antecesores, el Seat 600 fue el primero de fabricación nacional que introdujo derivaciones, algunas muy populares y otras piezas únicas. Por orden cronológico se conocen los siguientes:
- Seat 600 Descapotable (1957). Variante de la primera versión, disponía de un techo de lona practicable.
- Seat 600 Serra (1958). Sólo se fabricó una unidad por encargo de un sobrino del general Franco que quiso una versión hecha a su medida. De ello se encargó un carrocero llamado Pedro Serra Vidal. Y así surgió este modelo tipo coupé.


- Seat 600 Múltiple (1959). Sólo se fabricó una única unidad. Era de seis plazas y constaba de cuatro puertas y seis ventanas, y su carrocería le permitía usarlo tanto para turismo como para furgoneta.
- Siata Ampurias 750 (1960). La empresa Siata Española con fábrica en Tarragona creó nuevos modelos partiendo de la reforma de los automóviles Seat 600. Uno de ellos, bajo petición de los clientes y por encargo, fue el Ampurias 750. En realidad se trataba de una versión en tres volúmenes del Seat 600 cuyas transformaciones se acordaban con el propietario del vehículo. Sólo se fabricó durante un año y tan solo 24 unidades.
- Siata Turisa Spider 750 (1960). A partir de un Seat 600 la empresa Siata Española creó un modelo con carrocería coupé también descapotable. Se fabricó durante dos años con un total de 228 unidades. Su nombre homenajeaba al municipio de Tossa de Mar.
- Seat 600D Formichetta o Siata Formichetta (1960). Otra creación de Siata Española fue la versión furgoneta del Seat 600D, de la cual había la versión Combi con asientos posteriores y Standard destinada completamente a la carga de mercancías. Su nombre en italiano quería decir "hormiguita".
- Seat 600 Comercial (1961). Se caracterizaba por carecer de asientos traseros y las ventanas traseras estaban tapadas. Normalmente se usaron como vehículos de servicio e incluso la misma Seat los destinó para su Red de Asistencia en Carretera durante los años sesenta.


- Seat 600 Conti (1961). Modelo con fines deportivos, su nombre se debe a que disponía de diversos elementos subministrados por el ingeniero Franco Conti. Alcanzaba los 135 Km/hora.
- Seat 600 Playero (1961). Fabricado por encargo de Viajes Meliá, fueron versiones descapotables para fines turísticos, sin puertas laterales y con asientos de mimbre.Circularon por los hoteles de la Costa Brava, Mallorca, Benidrom y Torremolinos.
- Seat 750 Primavera (1961). Sobre un bastidor del Seat 600 se construyó una carrocería de este modelo coupé descapotable, fabricado por Talleres Bagovia de Cornellà de Llobregat. Tan solo se fabricaron tres unidades.
- Siata Tarraco 750 (1961). Carrozado sobre autobastidor BU tenía tres volúmenes y dos puertas, además de un motor más potente. Se construyeron 475 unidades más otras 123 del llamado Tarraco 850 el cual aprovechó el autobastidor del Seat 850.
- Seat 800 (1963). Era el Seat 600D de cuatro puertas, de 30 cm. más alargado que el convencional. Tuvo poco éxito de ventas y al cabo de tres años dejó de fabricarse.
- Seat 600 Buggy (1965). La Escuela Superior de Ingenieros de Logroño transformó una unidad matriculada en 1960 en un vehículo con carrocería tipo buggy, ligero y todoterreno.
- Seat 600-1000 Corver Cabriolet (1965). Con mecánica Corver, se construyeron un total de 16 unidades.


- Seat 600 Gabor (1966). Construido en los talleres de “Carrocerías Golobart” aprovechando la mecánica del Seat 600D, disponía de una carrocería de poliéster tipo coupé deportiva. Se construyeron muy pocas unidades.
- Seat 600 Roadster (1966). Diseñado por Pedro Serra Vidal, disponía también de mecánica Corver.
- Siata Minivan 8500 (1967). A partir de la base del Seat 600 se creó una furgoneta de mayores dimensiones que la Formichetta. Había tres versiones: la genérica (de 1 ventana lateral y una fila de asientos), la Combi (de 2 ventanas laterales y opción de dos filas de asientos) y la Múltiple (de 3 ventanas laterales y la opción de tres filas de asientos que lo convertían en microbús).
- Seat 600 Milton (1967). Derivado deportivo del Seat 600 tipo cabriolet con carrocería de fibra de vidrio diseñada por los hermanos Antonio y Pedro Mata, de Vilafranca del Penedès. Sólo se construyeron 36 unidades.
- Seat Roadster (1967). Fabricado por Pedro Serra Vidal, hubo tres versiones: Cupe, Cabriolet y Roadster.
- Siata Minivan 3000 (1969). Derivada de la Minivan 8500 tenía el techo 15 cm. más elevado debido a una ley del Ministerio de Industria por la cual solo se considerarían vehículos industriales y por tanto exentos del Impuesto de Lujo aquellos que poseyeran una altura mínima de 1,80 metros. A partir de 1972, tras la quiebra de Siata éste modelo fue construido por Ebro y en 1974 se fabricó partiendo de la base de un Seat 850 al haberse dejado de fabricar el Seat 600 en 1973.


- Siata Patricia (1969). Sobre la base del Seat 600 se construyó una carrocería abierta tipo playera y así surgió un modelo destinado a pasear a las autoridades por el recinto de la Feria de Barcelona el año 1969. Sólo se construyeron 6 unidades una de las cuales fue adquirida por el pintor Salvador Dalí para pasear a sus amigos de Portlligat.
- Siata 400CH (1970). Derivada de la Siata Minivan 3000, era una versión abierta con toldo opcional de cierre. Sólo se fabricaron 211 unidades hasta 1972.
En cuarto lugar, el Seat 600 se convirtió en símbolo del Desarrollismo y en pilar de la motorización porque su aparición en el mercado coincidió con el final definitivo de la Autarquía y la pronta aprobación en 1959 del Plan de Estabilización que supuso un fuerte crecimiento económico. Posteriormente se aprobaron los Planes de Desarrollo Económico y Social de 1964, 1968 y 1972 que provocaron un fuerte desarrollo industrial y la creación de los llamados polos de desarrollo, una época que coincidió justamente con la fabricación de tan mítico automóvil.
En quinto lugar, supuso la popularización del automóvil. No fue hasta el Desarrollismo que el coche de turismo empezó a ser adquirible por la mayoría de familias españolas. Anteriormente el automóvil era solo privilegio de las clases sociales altas y por ello la opción para desplazarse era ir a pie o bien viajar en transporte público. Desde la aparición del Seat 600 hubo una ruptura que comportó un notable aumento del parque automovilístico español.


En sexto lugar, con el paso de los años fue un automóvil usado indistintamente en todas las clases sociales. Inicialmente lo adquirieron las clases altas y clases medias emergentes. Su coste era de 65.000 pesetas. De hecho creó tal expectación en su época hasta el punto de que la elevada demanda obligó a que los particulares tuviesen que apuntarse en listas de espera de más de un año para acceder a un vehículo. Primero se tomaban los datos del cliente adquisidor, luego abonaba casi la mitad del precio del vehículo en un banco, y al cabo de seis meses ya tenía a su disposición el nuevo coche, previo pago del importe restante más el impuesto de lujo. A partir de los años setenta, cuando ya se había dejado de fabricar, era posible adquirir unidades más económicas de segunda mano, de modo que incluso gente de clase social más baja podía comprar uno.
En séptimo lugar, supuso una bocanada de libertad durante los años de la dictadura. Entre la sociedad española en general pero especialmente entre la juventud disponer de un Seat 600 significó disfrutar de una sensación de libertad de movimiento al posibilitar el desplazamiento hacia cualquier parte de España. Aumentaron los viajes, las excursiones, los domingueros y las salidas de fin de semana, creando un nuevo ocio y generando nuevas pautas de comportamiento condicionadas por el hecho de disponer de un vehículo propio.


En octavo lugar, fue el primer modelo de la marca Seat exportado a otro país. En 1965 llegaron las primeras 150 unidades a Colombia, y luego se comercializó progresivamente en Chile, Ecuador, Guatemala y Panamá. Por el continente europeo se vendió en Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Grecia, Holanda, Italia (aunque disponían del Fiat 600), Noruega y Portugal. Y también se exportó por África, siendo adquirido en países como Angola, Camerún, Congo, Costa de Marfil, Etiopía, Gabón, Guinea, Isla Reunión, Líbano, Senegal, Somalia y Zaire.
En noveno lugar, fue el utilitario de la época más fabricado y vendido de España. Entre 1957 y 1973 se fabricaron un total de 794.406 unidades, siendo 1957 el año que menos vehículos se fabricaron (2.510) y 1970 el que más (78.361). El salto cualitativo fue de 1963 a 1964, pasando de fabricarse 35.825 unidades a 61.423. En 1966 salió de fábrica el Seat 600 medio millón.
Y en décimo lugar, su fabricación conllevó a la modernización del sistema de producción y fabricación industrial. Fue el momento en que se pasó de un sistema manual a otro más robotizado, y cada versión que se creaba obligaba a reestructurar la organización de producción con la adquisición de nueva maquinaria, matricería, útiles y líneas de montaje. Aunque no se podría hablar de un sistema de división de la producción como se hace en la actualidad, sí que fue un precedente en este sentido, pues dentro de la misma factoría de Seat había la fundición de aleaciones ligeras, el taller mecánico y el taller de carrocerías, es decir, tres complejos diferenciados cada uno de ellos dedicados a unas partes del total. 


Tras dejar de fabricarse en 1973, la plantilla de Seat de Zona Franca de Barcelona superaba las 30.000 personas, se produjo la unidad 2.000.000 y se posicionó a nivel europeo en 8º lugar del ranking de fabricación de automóviles.
Seat tuvo otros utilitarios como el 850 (de 1966) y el 127 (de 1972). Tras la desaparición del Seat 600 no hubo un utilitario tan popular hasta la llegada del Seat Panda en 1980 y luego el Seat Ibiza en 1984. Otros modelos populares fueron el Marbella (de 1986), el Arosa (de 1997) y actualmente el nuevo Seat Mii. Contemporáneos al Seat 600 hubo entre otros el Citroën 2CV, el Simca 1000, el Renault 4, el Renault 5 y el Renault 8, utilitarios de otras marcas automovilísticas que pese a competir en el mercado con el mítico español jamás le ganaron la batalla en cuanto a número de ventas se refiere.
Tras 60 años todavía se puede apreciar alguna unidad circulando por las calles de la ciudad y resistiendo a los nuevos modelos y a la alta tecnología. Quienes tengan en propiedad un Seat 600 que continúen conservándolo como pieza de museo y como patrimonio industrial, y que los llamados Clubs 600 de toda España prosigan para el futuro con su excelente tarea de preservación y exhibición de un mito de la carretera.


Fotos: Archivo La Vanguardia, Archivo Seat, autopista.es, coleccionismocervecero.blogspot.com, diariomotor.com, jorm.es, okdiario.com.

1 comentario:

Tot Barcelona dijo...

Tuve uno, descapotable. B 212.646 Color gris...