lunes, 15 de marzo de 2010

El Villarato no existe

Desde hace poco tiempo ha sido acuñada una nueva palabra dentro del vocabulario del fútbol español: Villarato.
Entendemos por Villarato el trato de favor que otorgan los árbitros hacia el F.C. Barcelona para que éste gane los partidos y encabece el liderato de la Liga, siempre a costa de perjudicar los intereses del Real Madrid. El término procede del apellido del presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, el cual es quien presuntamente da las órdenes a los árbitros para que orquestren su trabajo sobre el césped a favor del equipo azulgrana y en contra de los blancos. El creador de este nuevo término y principal defensor de tal conspiración es el periodista y director del diario deportivo As, Alfredo Relaño.
Se dice que una de las razones por las cuales existe el Villarato es gracias a la estrecha amistad entre Ángel María Villar y el presidente del Barça, Joan Laporta, mientras que el presidente madridista, Florentino Pérez, apoyó la candidatura de Gerardo González.
En definitiva, que en el fútbol y en el deporte en general solo están arriba de todo de la clasificación los clubs más adinerados y quienes tienen más amistades hasta en el infierno, y cuantas más, pues más títulos lloverán. En España, la Liga siempre es cosa de dos.
No se puede negar que en determinadas ocasiones el F.C. Barcelona ha sido favorecido, pero indudablemente el Real Madrid lo ha sido en muchas más a lo largo de la historia, y usado perversamente y apadrinado como icono de la hispanidad cuando gobiernos nacionalistas de estado y autoritarios han estado en el poder.

Favoritismos aparte, el F.C. Barcelona ha ganado merecidamente todos los títulos que ha conseguido, pues por su condición y sus circunstancias ha tenido mayores dificultades que otros grandes clubs. Y eso no es precisamente victimismo como quieren hacer creer. Nunca he dudado de los méritos propios del Real Madrid por haber logrado ese magnífico palmarés que ningún otro equipo del mundo ha podido igualar. Algunos testigos me aseguran que en los años de las cinco ligas y Copas de Europa consecutivas el equipo era un auténtico crack futbolístico, y no lo dudo. Sin embargo, eso no quita que paralelamente el contexto histórico le favoreciera porque era el equipo de la capital del imperio. Y para ello basta con comprobar los títulos ganados por el Barça en años de democracia respecto los conseguidos en los años de dictaduras.
En estos momentos, por el goal average, el Real Madrid encabeza la clasificación de la Liga, y aspira a poder ganar el título. Aunque ha sido eliminado de la Champions League y de la Copa del Rey, un mal equipo perjudicado por el arbitraje difícilmente puede situarse en primera posición, así que por ser que hay un Villarato no parece que las cosas vayan tan mal. Eso sí, los próximos partidos que pueda perder el club blanco y que conlleven al Barça a ganar la Liga seguro que lo atribuirán al arbitraje. Y es que las afinidades hacia un equipo u otro hacen ver favores y prejuicios a donde no los hay. Todo depende del punto de vista y de qué equipo seas. Así que, ¿Villarato?, pues no, porque no existe.