domingo, 17 de enero de 2010

Adiós al “Chupa-Chups”, 40 años de un servicio popular

El pasado día 1 de enero desapareció en el barrio de Ciutat Meridiana de Barcelona un servicio urbano interior de autobús conocido como el “Chupa-Chups”. Tras cuarenta años circulando por calles estrechas, empinadas y curvadas de la última barriada de la ciudad, esta línea no tendría nada de especial si no fuese porque su establecimiento se consiguió gracias a las luchas vecinales. Así, nos ha dicho adiós todo un símbolo de una época.
Si efectuamos un repaso histórico, en Ciutat Meridiana habían dos servicios urbanos: la 2, que conectaba con la plaza de Tetuán, y la 202, que reforzaba a ésta desde el Clot. Sin embargo, con motivo del crecimiento del barrio y el aumento progresivo de su población, hacía falta mejorar las conexiones con transporte público con el resto de la ciudad. Las dos líneas antes mencionadas no efectuaban un recorrido por todo el polígono de viviendas, y el apeadero de RENFE de Torre Baró dejaba más bien lejos. Además, el hecho de que los bloques se hubiesen edificado sobre la montaña (en unos terrenos previstos para construir un cementerio, proyecto que se descartó por el exceso de humedad, la cual, por lo visto, era buena para los vivos) hacía complicado ir a pie, especialmente para la gente mayor, desde la parte baja hasta la más elevada y limítrofe con el municipio de Montcada i Reixac.

Las protestas vecinales y las constantes peticiones al Ayuntamiento de Barcelona dieron su fruto y la empresa municipal Transportes de Barcelona estableció un servicio especial que efectuaría un recorrido interior por Ciutat Meridiana que permitiría conectar toda la barriada hasta la parte, acercando el transporte público a los lugares más inaccesibles y facilitando el enlace con otros servicios con un simple intercambio y a un precio módico. El resultado fue la implantación en una fecha indeterminada del año 1969 de una nueva línea especial de microbús que, iniciándose en la avenida de los Rasos de Peguera, circularía por las calles de Costabona, Les Agudes y Perafita, haciendo su regreso por la avenida de los Rasos de Peguera hasta la calle de Vallcibera. No tenía número ni constaba en ninguna guía de transportes urbanos de Barcelona, y sólo tenía el indicativo de “Servicio interior Ciudad Meridiana”, siendo conocida a efectos internos como “Enlace línea 2”. A diferencia de las líneas convencionales de autobús cuyo billete sencillo era de 4 pesetas, esta, en cambio, sólo valía 1 peseta, el mismo precio que el de un Chupa-Chups, de ahí que popularmente esta línea se la bautizara con el nombre de éste caramelo. Al parecer, desde un principio la nueva línea obtuvo un excelente número de usuarios, motivo por el cual el microbús que tenía asignado fue sustituido por un autobús estándar.

Posteriormente, al servicio se le designó el número 0, y desde el 4 de febrero de 1974, era conocida como la línea 602. Durante los años posteriores no hubo modificaciones ni hechos relevantes. El 1 de junio 1985 volvió cambiar la numeración pasando a ser la línea 400.
Con el propósito de ampliar el recorrido hasta lograr una completa cobertura territorial por Ciutat Meridiana, el 7 de abril de 1994 modificó su recorrido pasando a ser de circunvalación, es decir, con un único origen y final en la calle de Vallcibera. Desde la calle de Perafita pasó a circular por Les Agudes y la avenida de Rasos de Peguera para continuar con su recorrido habitual. La nueva ampliación supuso la instalación de seis nuevas paradas. Aunque en los años posteriores las tarifas aumentaron de precio, el billete sencillo fue siempe inferior al del resto de servicios urbanos de autobús por su corto recorrido.

El 31 de octubre de 2002, volvió a cambiar de número, pasando a ser la línea 159, motivo debido a un reajuste numérico por parte de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) para que todas sus líneas se integraran a la numeración asignada por la Autoritat del Transport Metropolità (ATM), del 1 al 199.
El 26 de septiembre de 2003, se abrió la conexión entre la calle de Perafita y la avenida de Rasos de Peguera, en la zona más alta del barrio. Ello permitió la prolongación del “Chupa-Chups”, conjuntamente con las líneas 62 y 76.
Durante el año 2008, el vecindario de Ciutat Meridiana se alarmó al saber que se estudió la posibilidad de suprimir el “Chupa-Chups” porque su recorrido se superponía completamente al de las líneas 62 y 76, pero finalmente la propuesta se rechazó porque las terminales de las tres líneas eran diferentes, habiendo además el caso de algunos viajeros que tendrían que realizar un viaje suplementario por el barrio de Can Cuiàs.

Finalmente, la Entitat Metropolitana del Transport (EMT) no renovó la concesión de las líneas 80, 81, 82 y 83 a la empresa Transports Lydia, y abrió un concurso de adjudicación de las cuatro líneas a una nueva compañía, más el Chupa-Chups. A pesar de algunos movimientos de protesta, el objetivo se cumplió, y desde el 1 de enero de este año, la empresa Sagalés, con material móvil cedido por TMB, explota los servicios de Transports Lydia. Ello ha comportado la supresión del entrañable “Chupa-Chups”, absorbida por la línea 83 que se ha convertido en un Bus del Barri efectuando un completo recorrido de circunvalación por los barrios de Torre Baró, Ciutat Meridiana y Vallbona.
Agradecer al “Chupa-Chups” sus cuarenta años de servicio, pues ahora pasa a formar parte de la historia de un barrio y de una época. Que en la memoria histórica quede para siempre.

Nota: todas las fotografías han sido extraídas de la página web www.autobusesbcn.es

2 comentarios:

Pinzas dijo...

Recuerdo una vez en especial subiendo en él al Morera. Era un día muy frío y mi madre se estiró y subimos en el "chupa" al cole. La última cuesta, calle Perafita, una niebla espesísima impedía ver el Maestro Morera cuando llegábamos y, inocente de mí, pensé que ese día no habría clase porque el cole HABÍA DESAPARECIDO!!ajjaja

Anónimo dijo...

recuerdo hace ya muchos años, un monitor mio del esplai ciutat merdidiana, le "reclamaba" a un amigote suyo, que le debis una peseta, porque una vez lo invitó a dar un paseo en el chupa. Habian pasado mas de diez años. Inolvidable